miércoles, 26 de septiembre de 2012

Origen


Todo lo que tengo es esta ciudad
Y ésta me envuelve en su conjunto.

Aquí, me resultan demasiado predecibles las calles
Su familiaridad me compromete a escapar lejos;
Siento que corro el riesgo de perder la cordura, los huesos y la piel.

Transito las calles de este pueblo,
Reconozco su profundidad, sus direcciones y pavimentos,
Me asombro ante su anchura,
Su grandeza hace que me duelan las extremidades al andar;
Cada paso la vuelve más inmensa,
Cada paso hace que me cueste respirar.

Alguien que me ayude a huir…
Ando ansiosa de admirables alturas,
Me llaman esos paisajes solemnes, ese existir desconocido, esa libertad.

Éste lugar me sostiene sin opción a fuga,
A pesar de mi resignación y melancolía,
Éste lugar no me deja emigrar,
No importan mis ansias de ver el horizonte cercano,
Éste lugar es tan mío como yo soy suya.

En esta ciudad,
En esta noche,
Ya no queda más que el conformismo,
Me dejaré llevar por la neblina de la hora,
Estaré en cada muro, balcón, pasaje y quinta,
Me despediré con un reconocimiento…
Creo que moriré hoy, aquí, en esta urbe, llena de su totalidad.